La sostenibilidad es claramente uno de los objetivos más importantes del mundo; pero, ¿qué grupos pueden realmente hacer progresos ambientales a pasos agigantados? Chris McKnett argumenta que se trata de grandes inversores institucionales. Muestra cómo los datos financieros sólidos no son suficientes y revela por qué los inversores también deben observar las estructuras ambientales, sociales y de gobierno de una empresa.